sábado, 5 de mayo de 2012

Se acabó la calma.cap8

Seguíamos caminando a través de aquellas alcantarillas oscuras todos en silencio, Erik tenía esa mirada perdida hacía el horizonte como cuando miraba a la chica que murió en el descampado. Unos pasos delante nuestra se encontraban Luis y Alma que compartiendo una tierna mirada se cogieron de la mano.
-En verdad todo esto es irónico...-Le dice Luis a Alma mirando al suelo.
-Pues yo pienso que no tiene nada de irónico..Estamos perdidos en medio de un mundo que no quiere matar y dices que es irónico.-
-Alma piensalo otra ves,mientras el mundo se desmorona nosotros nos enamoramos.-Luis levanta la mirada del suelo y se la dirige a Alma con una tierna mirada.Esta le suelta la mano inmediatamente.
-¿Estas diciendo que te has enamorado?-Le pregunta con un todo de voz casi ala defensiva.-¿De quien?-
-Pues, parece mentira que no lo sepas aun..Me he enamorado de ti tonta.-Alma se para en seco y Luis la adelanta un paso,se para,se da la vuelta y al mismo tiempo sonríe.
-¿De mi?Yo no tengo nada especial...-Alma continua caminando con la cabeza agachada. Luis la cogió del brazo obligándola a quedasen muy cerca una cara de otra mirándose fijamente a los ojos.
-Mira,en mis planes no estaba enamorarme de ti, pero supongo que nadie puede elegir de quien se enamora. Sin saber demasiado bien como, te convertiste en todo para mí. Cada noche, antes de dormirme soñaba despierto con tus abrazos, con el sabor de tus besos y no podía evitar sonreír como un niño pequeño. Y te juro que cada vez que las cosas se torcían, y pensaba que te podía perder mi mundo se venía abajo y nadie más que tú podía devolverme la sonrisa. Y tu¿Crees en un nosotros?-
Luis acerca la cara a Alma como disponiéndole a darle un beso pero esta se suelta del brazo y continua caminando hacia delante. Luis se queda parado mirando como se aleja hasta que Alma se para en seco a unos pocos pasos de él.
-Yo no pedí esto, apareció sin comerlo ni beberlo. Yo nunca creí en que pudiera haber un nosotros.-Dijo Alma,su dulce voz me pareció mas bella que nunca.
-Lo entiendo..-Luis bajo la cabeza decepcionado.
-Espera a que acabe. Nunca creí en un futuro juntos ni en acabar enamorándome de ti..Es más, yo no creía en ti, ni en tus palabras. Gracias por hacerme cambiar de opinión contigo.-Alma se giro dedicándole una cálida sonrisa a Luis.
-¿Eso significa que sientes lo mismo?-Luis levantó la mirada con alegría.
-Pues..-
-Por fin os hemos encontrado.-Un gruesa voz sonó detrás nuestra a unos cuantos metros. Erik se incorporo para cogerme mejor y le dio la mano a Bell.
Teníamos que salir de allí cuando antes o si no  volveríamos a estar sometidos.
-Salir corriendo si de todas formas por ahí nos os podréis escapar.-La voz volvió a sonar esta vez mas cercana. Yo baje la cabeza y me acurruque en la espalda de Erik mientras este corría. Podía sentir su respiración y su corazón latiendo a una velocidad asombrosa. Llegamos asta el final de la calle de la alcantarillas y al girar la esquina nos dimos cuenta de que no había pared. A nuestra derecha se encontraba un pequeño riachuelo que iba directamente ala fosa común. La voz se iba acercandose cada vez más a nosotros,giraron la esquina y nos encontramos con dos criaturas de aquellas hembras. Su aspecto era muy diferente al de los hombres. Ellas tenían curvas en ese cuerpo de hojalata y los pelos de esparatrapo largos,eran igual de altas que los hombres aunque mucho mas guapas. Los chicos se quedaron mirándoles las piernas que se encontraban debajo de aquel corto vestido de hojalata. Alma miró a Luis con enfado pero este no se dio cuenta,estaba absorto con aquellas criaturas-barbies.
-No la subastéis chicas..-Detrás de la esquina se escuchaba la voz masculina que estábamos escuchando todo el tiempo. La voz era de nuestro amo.
-Mirad lo que pueden hacer mis pequeñas.-
Alma se pego ala pared y yo le dije a Erik que lo hiciera pero el seguía como hipnotizado por aquellas criaturas de hojalata. Las chicas se acercaron a Luis.
-Hola,guapo ¿Te vienes con nosotras?-
Luis se levanto hipnptizado por su "belleza" y se puso detrás de ellas. Ahora las chicas se acercaron a Erik.
-¿Y tu te vienes con nosotras?-
Yo tire de él con todas mis fuerzas hacia atrás hasta llegar al borde del riachuelo de la fosa que había.Al mirar hacía abajo vi  las manos que me dañaron las piernas en el fondo. Entonces note que las manos de Erik se aflojaban para dejarme caer e irse con ellas.

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